Este sábado 30 de noviembre de 2024 la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) comenzó sus actividades en la edición 38, con la encomienda de convertirse en un punto de encuentro cultural entre Guadalajara y España con la promesa de abrir un “camino de ida y vuelta” a los miles de visitantes que se acercan a esta fiesta de los libros que abre sus puertas del 30 de noviembre al 8 de diciembre, con la presencia de editoriales de más de 50 países, 850 autores y más de 650 presentaciones de libros.

El Rector General de la UdeG Ricardo Villanueva Lomelí en el acto inaugural señaló que durante los próximos nueve días se dedicarán los eventos a «la contemplación de la belleza de las palabras, a perdernos en senderos de historias insondables y a escuchar a las y los escritores de cuya pluma brotan las historias que nos hacen amar la literatura”; recordando que en esta ocasión, se contará por primera vez con el Pabellón UdeG, localizado en el Área Nacional de Expo Guadalajara, donde se podrán encontrar las novedades editoriales de la institución, así como los estands de la librería Carlos Fuentes, la Fundación UdeG y espacios para dialogar con investigadores sobre sus publicaciones.
El Rector de la UdeG saliente subrayó que la presencia española ha sido constante en la FIL, con la visita en anteriores ediciones de Cataluña, Andalucía, Castilla y León, y Madrid, lo que consideró una muestra de que la feria y este país “tienen una relación de largo aliento”, incluso contrariando la política pública nacional de confrontación que ha tenido el gobierno de Claudia Sheinbaum contra España.

“Quiero agradecer a España por ser, una vez más, nuestra compañera de viaje en esta travesía; por mostrar al mundo que el español no es sólo un idioma, sino un vehículo de emociones, un espacio de encuentro donde todas las voces se amplifican, un tesoro que compartimos y multiplicamos juntos. ¡Gracias, España!”.
En la inauguración de la feria, el Rector General recordó la elección de la Rectora del Centro Universitario de Los Altos (CUALTOS), Karla Planter Pérez, en más de 232 años de historia y luego de 50 rectores, el Consejo General Universitario designó a la primera Rectora General de la Universidad de Guadalajara.

Además, durante el acto inaugural Villanueva Lomelí anunció que como parte de las primeras decisiones de la rectora general electa, se designó al maestro José Trinidad Padilla López como nuevo Presidente de la FIL Guadalajara.
La Directora General de la FIL, maestra Marisol Schulz Manaut, agradeció la disposición de la rectora general electa y del rector general, y destacó el apoyo de la delegación española y de las y los integrantes del gremio editorial durante casi cuatro décadas.

El Ministro de Cultura de España, Ernest Urtasun, agradeció la bienvenida a la delegación de su país y recalcó que durante estos días la lectura se convertirá en otro factor en común entre ambas sociedades. “No hay experiencia más solidaria y plena que la lectura; no hay nada que nos garantice una carta de ciudadanía más democrática y horizontal que un libro entre las manos; nada que nos abra la puerta a tantos lugares y realidades como la condición de lector o de lectora”, subrayó.

Durante la inauguración de la feria, el Rector General de la UdeG entregó el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances al escritor mozambiqueño Mia Couto.
Couto nació en Beira Mozambique, hijo de una familia de migrantes portugueses; se ha dedicado al periodismo, pero también estudió biología; entre sus obras destacadas se encuentran Tierra sonámbula, Cada hombre es una raza, Trilogía de Mozambique, Voces anochecidas y El mapeador de
ausencias.

En su discurso de agradecimiento, Couto se refirió el trabajo del escritor Octavio Paz, a quien conoció gracias a los libros que su padre le acercó de niño, y que “no encajaban” con los otros libros que tenía en su colección.
Mencionó que los poemas de Paz influyeron en su forma de escribir el mundo, y aseguró que a raíz de su encuentro con esa literatura emprendió una búsqueda para escuchar a quien lee sus letras y así intercambiar almas con los lectores.